La vida ha sido hasta ahora bastante generosa conmigo. Me ha regalado satisfacciones más allá de las que me hubiera atrevido a soñar. Junto al nacimiento de mis hijos, pocas mayores que las de ahora: encontrarme en la actualidad siendo alcalde, vuestro alcalde. No sé si el destino me permitirá seguir siéndolo en el futuro, no lo sé, en realidad nadie lo sabe. Por eso deseo aprovechar las oportunidades que se me presentan para expresar mis convicciones más profundas como uno más, como un hombre llano que ama profundamente a su pueblo.
Mi idea básica, fundamental, sobre la que gira toda nuestra acción de gobierno en el Ayuntamiento, es que Alcaudete somos todos. No creo en las soluciones individuales. Nadie, absolutamente nadie posee las facultades, la varita mágica, para por si solo, arreglar y solucionar los problemas sociales y económicos: nuestros problemas colectivos. No existen, ni han existido recetas ni medidas milagrosas, quien afirme poseerlas sencillamente está mintiendo con la idea, quizá, de buscar réditos electorales basados en la falsedad.
Imagino nuestro futuro como una cuadrilla que va al campo a recoger la cosecha de aceituna; en este caso la cosecha del progreso y el bienestar. En esa cuadrilla todos se ayudan, unos tiran de los fardos, otros cogen la vibradora, otros ayudan con la piqueta, otros utilizan la sopladora, otros cargan el remolque, etc; pero siempre bajo la idea de que todos concurrimos con la actitud de quien está incompleto sin la otra parte. Puede ser que el gobierno municipal tenga más responsabilidades que nadie en el mantenimiento y buen estado de la tierra, para eso está, para eso es elegido, pero ¿qué utilidad tienen la sopladora, la vibradora, los fardos o la piqueta por si solas si son incapaces de ayudarse, de colaborar, de engranarse y ser complementos unos de otros, de ser las piezas complementarias de la sociedad.
Por eso en este año y poco que llevo de alcalde siempre he buscado el diálogo y la cercanía; pero no el diálogo fácil, el de buenos y dóciles, sino el verdadero. Creo que esta idea, la de la complementariedad, la del juntos avanzamos, es la mejor para la realidad que nos ha tocado vivir. O avanzamos juntos o no avanzaremos.
Hace tiempo que aprendí que las batallas del todo o nada, de buenos y malos, son el mejor camino para que nada cambie y para que todo se estanque. Quiero un ayuntamiento orientado a la suma y a la concertación, donde proyectos como la construcción del nuevo Teatro Municipal, las mejoras llevada a cabo en el cementerio municipal de Santa Catalina, las modernas instalaciones deportivas de Noguerones, el nuevo alumbrado público en Bobadilla o el recién construido centro social en Sabariego, además de servir para transformar la realidad ayuden a acrecentar nuestra autoestima como pueblo. Este es un cambio menos visible, imposible de cuantificar, pero a mi juicio de gran trascendencia. El cambio de la autoestima va a mejorar la percepción que tenemos de nosotros mismos y los posibles horizontes que, unidos, hemos Cementerio Primera piedra futuro Teatro Municipal La agenda de la alcaldía Obras Antes y después Oficios de antaño Nuestros comercios Reuniones El Ayuntamiento de Alcaudete visita Manlleu Concejalía de Juventud y Deportes Concejalía de Igualdad y Participación Ciudadana Aldea Turismo Hospedería “Antigua Cárcel” Camino mozárabe de Santiago Taller de empleo de conquistar.
Yo, mientras ustedes me lo permitan, voy a seguir por el mismo camino: construyendo un Alcaudete para todos y con todos.
Vuestro Alcalde
